viernes, 6 de abril de 2012

El capitán salió a comer y los marineros tomaron el barco

El libro editado por Anagrama
no es difícil de encontrar, es más
habitual verlo con las tapas rojas
«Escribir te puede atrapar. Algunos escritores tienden a escribir lo que ha complacido a sus lectores en el pasado. Entonces están acabados. La vida creativa de la mayoría de los escritores es corta. Oyen los aplausos y se los creen. Sólo existe un juez definitivo de la propia escritura, y es el escritor. Cuando se deja llevar por los críticos, los directores editoriales, los editores, los lectores, está acabado. Y, por supuesto, cuando se deja llevar por su fama y su fortuna, lo puedes tirar al río con la demás mierda».  Esos destellos de brillantez que agitan las aguas del mundillo literario son una buena excusa para adquirir el libro: a unos les causarán alborozo; a otros rabia, depende de cuál sea la musa escogida. El texto salió a la luz gracias a John Martin, editor y amigo de Bukowski durante más de veinte años. Es un diario sobre los últimos meses de vida del autor. Por lo general el día a día de un escritor no suele ser muy emocionante, pero Bukowski es una excepción. Basta decir que fue él quien inspiró la serie Californication.

Hay varias ilustraciones que
amenizan las letras ásperas
propias de Bukowski
Muchas frases huelen a nihilismo, como si a esas alturas sólo viviese para matar el tiempo y escribir; para beberse las horas mientras espera el momento fatídico, ése en el que la página en blanco lo aplaste sin poder concluir ni una línea. «No hay más remedio que darnos a nosotros mismos por perdidos: cualquier movimiento conduce a un jaque mate». El estilo es directo porque deja las florituras a un lado y va al grano sin miedo a ser prosaico; algo que, dependiendo del lector, tal vez resulte desagradable. A mí no me molesta, al contrario; pero hay que evitar caer en el error de imitarle: ya hubo un Bukowski. ¿Y cómo es su vida diaria? Alcohol, apuestas, amenazas... Todo un ejemplo a seguir. No tuvo una existencia fácil, y se percibe un resentimiento en lo que hace. Desde mi punto de vista está en su derecho, quizá la escritura le sirviese para mitigar el dolor acumulado desde la infancia.

¿Alimentaría el escritor su fama
de bebedor compulsivo?
Tras leer el diario he de admitir que me hizo cambiar de opinión en un asunto: las máquinas de escribir. Sólo necesitaba que alguien me dijese, una por una, todas las razones por las que un ordenador es más conveniente; yo ya las sabía, pero la visión romántica de la máquina ensombrecía mi raciocinio. Es interesante cómo entrelaza reflexiones cotidianas, vulgares, con pensamientos trascendentes expresados también desde la sencillez. Algunos de ellos, los que versan sobre la muerte, dan la sensación de que Bukowski intuía su fin, el cual se produjo un poco después allá por mediados de los noventa. El libro no está mal, ya que posee situaciones cómicas cargadas de realismo e ideas llamativas; sin embargo, no es muy prolijo en páginas, así que puede terminarse antes de lo esperado. Aun teniendo eso último en cuenta es digno de ser leído.

—¡Pero si es Bukowski!, he leído todas tus novelas, tío.
—No me jodas...

6 comentarios:

  1. Pues no la he leído, pero le tengo unas ganas tremendas desde que leí Correos. Es lo malo de querer comprarse todos los libros y tener un sueldo de prácticas (osea, cero).

    Yo caí una vez en la tentación de imitarle descaradamente, pero tú lo has dicho: Bukowsky ya hubo uno, y las imitaciones son tan evidentes que quedan muy burdas. Eso no quita para que tenga un estilo del que aprender mucho, sobre todo en agilidad y lenguaje directo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuando yo hice prácticas, hace una década, recuerdo que cobré una gorra, una camiseta y dos llaveros... Me los dio el subdirector, que «casualmente» era el hijo del director.

      Imitarle es una mala idea porque, como dices, se notaría bastante... Hay quien no se percata de eso.

      Eliminar
  2. No he leido mucho a Bukowski pero esta claro que el de Californication es una burda imitación.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí esa serie me gusta, lo poco que vi de ella fue entretenido. No les culpes por inspirarse en Bukowski jeje. De todas formas no creo que al mencionado le hiciese mucha gracia, porque en el diario rechaza una serie que va sobre él.

      Eliminar
  3. La verdad es que no he leído a Bukowsky. Todo lo que sé de él es por referencias. Debería poneralgubo de sus libros en "pendientes".

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Te recomiendo el de «Pulp», es muy simpático. El diario también es entretenido. Son libros cortos, pero seguro que los relees alguna vez.

      Eliminar