sábado, 20 de noviembre de 2010

El principito


Un curioso relato escrito expresamente para los más pequeños; pero del que los adultos también pueden extraer muchas ideas interesantes que pueden ser interpretadas de distintas maneras. Fue escrito por un piloto de aviación francés: Antoine de Saint-Exupéry. Durante uno de sus viajes tuvo un accidente en la parte de Libia del desierto del Sáhara, tanto él como su acompañante -el navegador- sobrevivieron; sin embargo, sufrieron los estragos de la deshidratación y ambos experimentaron alucinaciones visuales y auditivas. En el libro, un piloto que también tiene un accidente en el desierto se encuentra con el principito, ¿casualidad? Desgraciadamente el autor desapareció durante una misión a bordo de un Lockheed P-38 Lightning, a la temprana edad de cuarenta y cuatro años. Su legado aún perdura hoy, encerrado en unas páginas maravillosas que narran uno de los cuentos más célebres de la literatura.


Se ha meditado mucho sobre los múltiples mensajes que pueblan las líneas del texto, y no hay consenso sobre el verdadero significado de la mayoría. Mediante la prosopopeya típica de los cuentos, el escritor crea personajes a partir de una flor efímera o un zorro astuto, el cual le dice al principito una frase muy conocida entre las personas que han leído la obra: "He aquí mi secreto. Es muy sencillo. Consiste en que no se ve bien sino con el corazón, pues lo esencial es invisible a los ojos". El libro tiene abundantes frases que nos harán cuestionarnos el comportamiento de los adultos, conseguirá que visualicemos nuestra transición de la infancia a la madurez, y veremos en lo que nos transformamos caminando por esa senda que nos impone el padre tiempo. Todo eso, en apenas cien páginas y con una prosa sencilla destinada a los niños, demostrando que no hace falta recurrir a lo ampuloso para transmitir ideas que hagan reflexionar al lector.


Sinopsis:
"En esta serie, un aviador —Saint-Exupèry lo fue— se encuentra perdido en el desierto del Sáhara, después de haber tenido una avería en su avión. Entonces aparece un pequeño príncipe. En sus conversaciones con él, el narrador revela su propia visión sobre la estupidez humana y la sencilla sabiduría de los niños que la mayoría de las personas pierden cuando crecen y se hacen adultos.
El relato viene acompañado por ilustraciones dibujadas por el autor.
El principito vive en un pequeño planeta, el asteroide B 612, en el que hay tres volcanes (dos de ellos activos y uno no) y una rosa. Pasa sus días cuidando de su planeta, y quitando los árboles baobab que constantemente intentan echar raíces allí. De permitirles crecer, los árboles partirían su planeta en pedazos.
Un día decide abandonar su planeta, quizás cansado de los reproches y reclamos de la rosa, para explorar otros mundos. Aprovecha una migración de pájaros para emprender su viaje y recorrer el universo; es así como visita seis planetas, cada uno de ellos habitado por un personaje: un rey, un vanidoso, un borracho, un hombre de negocios, un farolero y un geógrafo, los cuales, a su manera, demuestran lo vacías que se vuelven las personas cuando se transforman en adultas.
El último personaje que conoce, el geógrafo, le recomienda viajar a un planeta específico, la Tierra, donde entre otras experiencias acaba conociendo al aviador que, ya habíamos comentado, estaba perdido en el desierto."

La novela escoge entre algunos arquetipos de la sociedad actual, enfrentándolos a la lógica aplastante del protagonista, que no entenderá por qué un rey quiere gobernar lo ingobernable o por qué un borracho no deja de beber. Además contiene una vehemente crítica al materialismo propio de los mayores, que muchas veces juzgan la belleza de un objeto por lo que cuesta. Las lecciones morales que contiene este relato, pueden llegar a golpearnos inopinadamente en cuanto las descubrimos; para el principito, la rosa que posee es muy valiosa porque sólo existe una en todo su diminuto planeta, cuando el piloto la desprecia explicando que se trata de una planta anodina, el principito se enfada, pues para él, esa flor, la única que tiene, es evidentemente muy importante. En esa parte, el autor le da un buen azote a la empatía atrofiada que asola el mundo contemporáneo. Estamos ante uno de esos libros que merece la pena no perderse antes de escribir el último verso de nuestra existencia; se puede leer en una hora escasa y seguramente la primera vez que lo hagan, no será la última. Hay una versión cinematográfica de 1974, no la he visto y a pesar de ello no aconsejaría hacerlo antes de leer el libro. Tuvo un par de nominaciones al oscar gracias a la música.

Por último, voy a advertir que la edición de Publimexi puede ser muy económica, pero adolece de tener faltas ortográficas por doquier. Recomiendo comprar cualquier otra versión aunque sea más cara. Merece la pena. Un saludo a todos esos niños que están encerrados dentro de vosotros.


7 comentarios:

  1. Este es uno de esos libros que se conocen más por recomendación, por el boca a boca, que por cualquier tipo de mitificación o mercadotecnia. Cada lectura revela un nuevo mensaje, y aunque no sea así, tan sólo por la sensación que despierta una vez cerrado y terminado merece la pena leerlo y releerlo, así como recomendarlo, regalarlo y compartirlo.

    Creo que todos los que lo hemos leído sabemos lo que es mirar a un sombrero y ver a una serpiente que se ha tragado a un elefante.

    Has despertado mi nostalgia con este post. ;D

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  2. Un buen libro, pero siempre he pensado que se da a leer demasiado pronto a los niños y no saben extraer todo lo que hay en el.

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  3. Estoy con Odiealex, este libro no es para niños, no pueden apreciarlo; es más para adolescentes. Yo lo leí un par de veces hace mucho tiempo, ya casi no lo recuerdo... Debería volver a comprarlo.

    Me parece un aberración que una editorial publique un libro con faltas de ortografía.

    Un saludo.

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  4. Hola Lobo, pues no había caído y es verdad, yo hasta ahora no recuerdo haber visto anuncios del libro, y sin embargo todos lo conocen.

    Hola Odiealex, estoy de acuerdo con lo que dices, los peques -la mayoría- no saben sacar todos los mensajes. De todas formas no pasa nada si lo leen, hay casos peores, por ejemplo, darle a un adolescente "La regenta", una garantía asegurada de que no volverá a coger un libro en su vida. xD

    Hola Sibarita, pues aquí en España hay alguna que otra editorial que tiene la insana costumbre de no corregir a sus autores, el resultado son libros con no menos de 30 faltas...

    Un saludo y gracias por comentar.

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  5. Un libro para leer una vez por etapa de la vida.
    Saludos, llego por aquí por casualidad.
    Me apunto a seguidores.

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  6. Hola Mei, sí que es uno de esos libros que conviene releer de vez en cuando.

    Gracias por comentar.

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  7. Qué razón con lo de Publimexi. Me estoy leyendo el libro Diario de Ana Frank de esta editorial y he encontrado ya una falta de ortografía; por no hablar del mal uso de los signos de puntuación...

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